domingo, 20 de julio de 2014

Alegria en escabeche

Mi definición de alegría de hoy es más simple que la tabla del 1.
Resulta que hice mis primeras berenjenas en escabeche. Y seguro usted, señor lector, se está preguntando como algo tan pavote me hizo el día. Y si, es así. Pregúntese menos y alégrese más.

Me pareció que en estos momentos de bombardeos en Gaza, de paros portuarios en Rosario, de aumentos del 114% en los parquímetros, lo mejor es defender la alegría. Como se pueda.

Defender la alegría como una trinchera 
defenderla del escándalo y la rutina 
de la miseria y los miserables 
de las ausencias transitorias 
y las definitivas 

defender la alegría como un principio 
defenderla del pasmo y las pesadillas 
de los neutrales y de los neutrones 
de las dulces infamias 
y los graves diagnósticos 

defender la alegría como una bandera 
defenderla del rayo y la melancolía 
de los ingenuos y de los canallas 
de la retórica y los paros cardiacos 
de las endemias y las academias ...


Lo dijo Benedetti. Yo lo intento. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario